Hoy terminan las jornadas en homenaje a Rafael Andolz, con la inauguración del parque que llevará su nombre y que está junto a nuestro local.
Han intervenido: Nacho Castán, sobrino de Rafael Andolz; Carmen Solans, de nuestro grupo y el Alcalde de Huesca.
Estás son las palabras que Carmen ha pronunciado en nombre del Grupo Scout
Agradezco la oportunidad de hablar hoy aquí en nombre de los scouts de Huesca, y sobre todo del Grupo Scout Rafael Andolz, que él fundó con el nombre de "Ramón y Cajal" y que este año cumple 50 años de vida. Quiero agradecer también al señor concejal Antonio Sanclemente el interés que se ha tomado desde el principio por este proyecto. 20 años después de su muerte la cabezonería, sobre todo de Toño Sanagustín y Juanjo Sanagustín, scouts del Grupo San Jorge del Perpetuo Socorro y la implicación de otras muchas personas nos ha traído al acto final de esta semana de homenajes. En esta demora de 20 años, ha jugado en contra de Rafa una frase que el repetía mucho: "En esta vida hay que ser largo en faciellas y corto en contallas". Él jamás presumió de sus logros. Quizá en algunos medios académicos se le mirase por encima del hombro, o incluso se le considerase un advenedizo, pero esto nunca fue así en el mundo del escultismo, en el que siempre tuvo un grandísimo reconocimiento que traspasó nuestras fronteras. Una constante en su vida fue no transitar por los caminos trillados y así, fue un precursor de muchos métodos y corrientes que después se generalizaron. Este no ir nunca por el camino trazado fue lo que llevó a Rafa a iniciar el escultismo en esta ciudad a mediados de los años 60 del s. XX. Desde entonces estos grupos, nuestro grupo, han destacado por ser acogedores. Aquí caben todos y todas. Chicas y chicos de todos los barrios de la ciudad y de todos los colegios, de todas las procedencias sociales, aquí están los listos y los que no lo somos tanto, la gente más corriente y los bichos más raros, los de cualquier ideología política, desde un futuro coronel de la Guardia Civil hasta un insumiso que se negó a hacer el servicio militar, los grandes montañeros, los habilidosos y los torpes. Aquí todo el mundo encuentra su lugar y vive una gran aventura, y esto es gracias a Rafa, que nos dio un horizonte, una meta, una idea. Que nos enseñó mucho de su enorme generosidad, "dar sin contar" era parte de una oración que él repetía. Y que nos aunó a todos, scouts del pasado, del presente y del futuro en torno a la que es divisa de este movimiento que se extiende por todos los continentes: "Dejar el mundo mejor de como lo encontramos". Gracias Rafa por ponernos en ese camino, en él seguimos y seguiremos. Buena Caza